El teletrabajo entre los profesionales autónomos es bastante común. Desde antes de la irrupción del Covid eran ya muchos los autónomos que disponían de su oficina en su propio domicilio. Pero una vez que el teletrabajo se ha instalado en nuestro tejido profesional ha llegado el momento de establecer las condiciones, especialmente las relacionadas con Hacienda.

Según está establecido desde hace ya unos años los autónomos que desarrollan su actividad laboral en su domicilio podían deducirse ciertos gastos comunes como son la electricidas, el gas, internet o el agua pero siempre proporcionalmente entre los metros totales de su vivienda y los dedicados a su "oficina". Pero no había quedado claro que el IVA correspondiente también pudiera hacerse.

En la actualidad se estima que más de 12% de los profesionales autónomos desarrollan su actividad en su domicilio pero podrían ser bastantes más. Según la última modificación de julio de 2023 realizada por el TAEC -Tribunal Económico Administrativo Central - permite que los autónomos que teletrabajan se puedan deducir el IVA de los suministros de la vivienda. Pero siempre estableciendo la parte proporcional.

La pregunta que surge es ¿merece la pena el esfuerzo de calcular estos porcentajes? Cada caso es único y convendría estudiarlo detenidamente para poder tomar la mejor decisión, al menos desde un punto de vista económico.

Desde Asequo podemos ayudarle a tomar la decisión más inteligente para su caso particular. En la mayoría de las ocasiones el esfuerzo no va a merecer la pena pero hay otras situaciones en las que podría compensar. Son muchos los autónomos que pueden aprovechar el hecho de poder deducirse el IVA de los recibos de sus suministros para así poder compensar el hecho de tener que trabajar desde casa. Si a los trabajadores asalariados que teletrabajan, es la empresa la que debe "compensarle" por los gastos extra, es normal que los autónomos también puedan beneficiarse de los gastos extra ocasionados desde el domicilio.